El futuro de David Albelda

--> Son las cuatro de la tarde, es viernes, 31 de mayo para concretar. A esta hora no tengo idea de si David Albelda ampliará su contrato una temporada más con el Valencia, acabará jugando el año que viene en otro lugar o terminará retirándose cuando el 30 de junio finalice su actual vinculación. Es más, casi podría asegurar que el propio David Albelda no tiene clara cuál de esas tres posibilidades acabará tomando. La primera no depende directamente de él y las otras dos no acaban de convencerle. Pero, sinceramente, creo que cualquier camino que escoja será acertado y que el Valencia, ya sea este verano o el siguiente, tardará mucho tiempo en encontrar un jugador que marque tanto el devenir del equipo, del club.

Un artículo de Jorge Segura (@JSeguraClara).
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David Albelda. Foto: Vavel España.

Los inicios de Albelda en el Valencia

     Albelda se asentó en el Valencia cuando más complicado lo tenía. Tras una grave lesión y una segunda cesión al Villarreal, llegó a un equipo que había vuelto a ganar un título, la Copa del Rey de 1999, después de 20 años en blanco. Llegaba además para pelear por un lugar en un centro del campo afianzado, con la veteranía de Milla, el desparpajo juvenil de Farinós y Gerard López y la creciente explosión talentosa de Mendieta. Lo tenía difícil como casi siempre en su carrera.

     Sin embargo, Milla cayó lesionado y Albelda comenzó a tener la confianza de Héctor Cúper. Aun así, le tocó esperar a la siguiente temporada para hacerse imprescindible. Farinós se marchó al Inter de Milán y Gerard al Barça. Unida a la venta de Claudio López, el Valencia parecía predestinado a derrumbarse tras haber alcanzado la primera final de Copa de Europa de su historia. Pero ahí emergió la figura de Albelda.

     Aunque los valencianistas ficharon a Didier Deschamps (del que Albelda absorbió como una esponja posicionamiento táctico y capacidad de liderazgo en los entrenamientos), fue David quien se convirtió en el centro de equilibrio del equipo. A él se unió en lo creativo Rubén Baraja. Ambos convirtieron en una eterna pareja que construyó, junto a grandes futbolistas principalmente en la defensa, la mejor etapa del club. Esa que ya conocen todos: la final de Champions de Milán, dos Ligas, una Copa de la UEFA, una Supercopa de Europa y el colofón de mejor equipo del Mundo en el año 2004.

Pasando de Madrid y Barça 

     Lo que muchos no saben de esos años es que Albelda dijo NO al Barça. Y, sobre todo, dijo NO al Real Madrid. En el año 2002, tras perder la Liga inesperadamente, Florentino intentó ‘robarle’ al Valencia a esa pareja de hecho. Lo intentó a su manera. Una especie de “tú arrástrate, que ya estoy yo para levantarte”.

     Un verano antes, el ahora nuevamente presidente madridista casi lo consigue con Mendieta. Florentino convenció a Gaizka pero le puso, como condición para su fichaje, la obligatoriedad de descararse públicamente y decir que se quería marchar al Real Madrid. Florentino tiene muchos negocios en Valencia y no quería verse envuelto en una guerra similar a la que provocó el fichaje de Mijatovic unos años atrás. Mendieta lo hizo, el Valencia se enrocó y Florentino acabó dejándolo tirado.

     Con Albelda (y Baraja), Florentino volvió a la carga. Tenía más de 6.000 millones preparados para la operación, pero David dijo NO.

 Pleitos con el club

     Esa es la diferencia entre David y muchos otros que han pasado por el Valencia en tantos años. Años malos, buenos y excelentes. Albelda ha seguido viviendo en el pueblo, la Pobla Llarga, durante gran parte de su carrera, y ahora lo visita casi a diario. Ha ganado nuevos amigos, pero sigue yéndose a comer con los de siempre. Sabe lo que piensa y siente el aficionado. Es más, aunque muchos lo despreciasen cuando decidió denunciar al dueño del club en enero de 2008, él sigue entendiéndolos.

     Albelda denunció a Juan Bautista Soler. Porque él fue quien tomó la decisión de ‘cargarse’ al valenciano, Santi Cañizares y Miguel Ángel Angulo. Ronald Koeman fue un mero ejecutor. Aquello le costó a David la Copa que ganó el Valencia en el Calderón, la Eurocopa del 2008 (probablemente el título) y, lo que es peor, le supuso un golpe anímico muy doloroso a él y su familia. Albelda dijo NO a pasar página. Porque no merecía lo que Soler le hizo y luchó por dejarlo claro públicamente. Yo hubiera hecho lo mismo, también sé (como descubrió Albelda desde que tomó la decisión) que la mayoría no.

     Pese a todo Albelda ha vuelto, recuperó la capitanía, ha aguantado la peor época de la entidad que ha sucedido a la más gloriosa y en Mestalla, su casa, la gente vuelve a ponerse en pie para despedirle en cada partido. Su futuro puede quedar más claro la próxima semana, pero lo que deja claro su pasado es que el Valencia no volverá a tener un David Albelda. Como no tuvo otro Antonio Puchades (que en paz descanse).

Escribe para 'El Chut': Jorge Segura (@JSeguraclara)
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El Pájaro es la clave

--> Cada vez queda menos para conocer quién será el ganador del ansiado tesoro de la máxima competición mundial de baloncesto. Claro está que hablo de la NBA y su codiciado anillo. Tras el sorprendente “rosco” que los Spurs de un inspiradísimo Parker le endosaron a los Grizzlies de Marc, sólo queda por dirimir quién los acompañará en la final del todo por el todo. Y digo sorprendente porque, a pesar de que los de San Antonio partieran como favoritos, se presumía una final de conferencia más igualada y competida de lo que hemos podido ver.

Un artículo de Juanlu Gómez (@JuanluGomez).
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Chris Andersen, "el Pájaro".

Memphis vs San Antonio

     El equipo de Memphis recibió de su propia medicina, a manos de unos Spurs que basaron su juego en una defensa asfixiante sobre la estrella de los Grizzlies, Zach Randolph (que bajó sus porcentajes de tiro de campo hasta poco más del 33%, cuando había promediado un 46% en temporada regular), y en la lúcida dirección del francés Tony Parker, que brilló con luz propia e hizo brillar al resto de sus compañeros para que los de Gregg Popovich se colaran una vez más en las series finales de la NBA.

     En el cuadro de los Grizzilies, cabe destacar la irrupción de un secundario como es el alero Quincy Pondexter. que fue capaz de enchufar a la franquicia de Tennessee en momentos clave, y el liderazgo que muestra día a día Marc Gasol en la pista. El catalán no tuvo sus registros estadísticos más altos en esta serie, pero cuando participa el equipo lo nota.

La capacidad intimidatoria bajo los tableros y el carisma que desprende se han convertido en uno de los pilares de los Grizzlies de Memphis. Estoy seguro que Marc seguirá los pasos de su hermano mayor y terminará llevándose el anillo tarde o temprano.

Miami vs Indiana

     Y retomando el hilo, donde aún queda mucha tela que cortar es en la final de conferencia en el Este. Los actuales campeones, los Heat de Miami, se las están viendo y deseando para poder revalidar el título ante unos Pacers que están demostrando ser un sólido equipo.

     Las espadas siguen en todo lo alto y con ventaja de 3-2 para los Heat, pero ahora la bola volverá a volar en el feudo de los de Indiana y, tal como se está presentando la eliminatoria, aún queda mucho por decir.

     Y es en el aire donde encontramos al que, además de los de siempre, se está erigiendo como una de las claves de esta serie. Hablo del excéntrico número 11 de Miami, Chris Andersen, también conocido como “El Pájaro”. Vista la competitividad de la serie, la fuerza e intensidad que están exigiendo partido a partido los de Indiana a los campeones, el papel de jugadores como Andersen se antojan vitales.

Lebron James y los de siempre

     Cuando arriba hablaba de “los de siempre” quería hacer constar que es evidente que jugadores como Wade, con sus intermitencias, siguen aportando su estadística, al igual que Bosh. Y por supuesto “El Rey” sigue siendo El Rey. Hablo, cómo no, del baluarte y posiblemente el mejor jugador de baloncesto mundial en la actualidad, Lebron James. Doy por supuesto que, sin la aportación de éstos, la serie reflejaría otro marcador.

     Pero con estos supuestos confirmados, volvemos a la idea de la importancia de jugadores de segunda línea como Andersen.

   Sólo hay que ver la manera de levantarse del banquillo cuando es llamado a pista para darse cuenta de que este tío está enchufadísimo. Quiere jugar, quiere aportar, quiere ganar, quiere el anillo. Es intenso, incomodo, luchador, fajador.  Se pega como una lapa en defensa, lucha cada rebote, cada balón dividido. Sabe leer los espacios en ataque, anticiparse y usar su envergadura para crear sombras en la pintura. No es excelso en estadísticas, sale desde el banquillo y juega los minutos contados. Pero es el jefe de los intangibles. Esas cosas que no se ven, que no se contabilizan, pero que cohesionan a un equipo. Y en ese aspecto, jugadores como él son los que decantan un partido, una serie.     

Veremos con quiénes se verán las cara en las finales los Spurs. Todo está en el aire. Los de siempre tienen mucho que decir, pero como diría aquel rechoncho personaje de dibujos animados: “El Pájaro es la clave”.

Escribe para 'El Chut': Juanlu Gómez (@JuanluGomez)
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Juanlu Gómez es licenciado en Comunicación Audiovisual, 'community manager' y experto en baloncesto.


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Éric Abidal, futbolista antes que leyenda

--> "Me hubiera gustado seguir jugando aquí, pero el club lo ve diferente y tengo que aceptar esa decisión". Éric Abidal se siente futbolista. Aprecia el regalo que le ha hecho el cielo en colaboración con su propio empeño, y no lo quiere desperdiciar. ¿Por qué desea seguir jugando al fútbol? ¡Porque puede! ¡Porque tiene salud para hacerlo! "Mi única duda es la recuperación después de cada partido, saber si puedo jugar 90 minutos y repetir tres días después", reflexiona. Las pruebas de esfuerzo son de momento positivas. Con una pretemporada sin contratiempos, estaría a tope para jugar al máximo nivel. Pero el Barça no lo cree así. Abidal seguirá jugando en otro sitio, donde lo quieran como futbolista... y no sólo como leyenda.

Un artículo de Sergio M. Gutiérrez.
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Éric Abidal, manteado por sus compañeros del Barça.

--> La decisión: Las promesas de renovación automática en el caso de que volviera a jugar al fútbol cayeron en saco roto. El Barça ofrecía a Abidal un cargo institucional, el de director técnico de las escuelas del club en el mundo. Pero Abidal aspiraba a seguir siendo uno más de la plantilla. El Fútbol Club Barcelona ha optado por no ampliar el contrato de su jugador. Se trata de una decisión técnica, estrictamente deportiva y muy mal explicada.

"Que hable Zubi", se escaqueaba Rosell en rueda de prensa. "Esta decisión forma parte de un proceso en el que intervienen muchos elementos", se liaba Zubizarreta, y espetaba cada pocas frases la excusa de que no quería dar argumentos futbolísticos. ¿Y en qué se basa entonces la decisión de no renovar a un futbolista?

Zubi, Rosell y Abidal

     Porque Éric Abidal sigue siendo futbolista profesional. Y no pasa nada por tratarlo como tal, por comunicarle que no está al nivel, que el entrenador y la dirección deportiva quizá se equivoquen, pero que han decidido prescindir de sus servicios porque entienden honestamente que hay otros futbolistas mejor preparados, que merecen más que él ocupar ese hueco en la plantilla, futbolistas que ofrecen mayores garantías, futbolistas quizá como Adriano, como Bartra, como Mascherano, como algún fichaje necesario. No hubiera pasado nada por decir: "Abi, no tienes hueco en este equipo".

"Ha sido una decisión consensuada por todos los estamentos del club", zanja Rosell. Y nadie pronuncia el nombre de Tito Vilanova. Pero si Tito Vilanova hubiera dicho que cuenta con Abidal, Abidal estaría renovado.

La leyenda de Abidal

     Eso sí, Abidal tampoco habría aceptado una ficha por compasión. Porque Abidal adora a sus compañeros, y quiere ayudarlos, no estorbarlos. Acaba la rueda de prensa y los abraza uno a uno entre aplausos. "Sois mi segunda familia", les dice. Y expresa sus emociones con la sencillez de quien no tiene nada que esconder: "Primero quiero disfrutar hasta el último segundo de mi contrato con el Barça". Y guiña el ojo con maldad a Rosell antes de confesar: "Ya buscaré equipo cuando acabe la temporada".

     Éric Abidal ya es leyenda, pero aún no quiere serlo. La vida le ha enseñado a ser realista, y a pedir lo imposible como sólo los realistas harían. Quizá nunca vuelva a ser el extraordinario futbolista que fue. Qué más da. Abi continuará improvisando, viviendo al día. ¿Dirigir las escuelas deportivas del Barça? Por supuesto. Lo hará con gusto. Pero lo hará en el futuro, cuando deje de ser futbolista. Cuando acepte por fin su condición de leyenda.

Escribe para 'El Chut': @sergiomguti
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Los Otros

--> Las elecciones, o amago de comicios, es un periodo apasionante de la vida pública, sea política o deportiva. Es el único periodo de año en el que los dirigentes que pretenden revalidar mandato, se disfrazan por un momento de personas normales que mantienen contactos normales con las gentes normales. Incluso visitan estudios de radio, conceden entrevistas y responden a las preguntas, algunas incómodas -las menos- que les formulan los periodistas. Son tan escasos estos momentos que casi dan ganas de llorar de la emoción cuando vives uno de ellos.

Un artículo de Luis Jiménez (@lujimmix).
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El periodista José Ramón De la Morena entrevista a Florentino Pérez, presidente del Real Madrid. Foto: Cadena Ser.

Florentino Pérez y Los Otros

                En realidad, estos baños de populismo circunstancial no sirven para gran cosa, salvo para constatar que los dirigentes, en este caso deportivos, viven en una extraña burbuja que apenas roza las primeras capas de la realidad, nunca reconocen haber cometido algún error y que la culpa siempre corresponde a Los Otros. Florentino Pérez aspira a un nuevo mandato en uno de los momentos más delicados y bajos de su trayectoria como presidente madridista. No tendrá ningún problema en lograrlo porque, a día de hoy, las condiciones para hacerle frente ante unas urnas son tan leoninas, que es muy difícil reunirlas todas 

¿Responsables de estas condiciones? Una Ley del Deporte que yo no dicté y que es tan perversa que los directivos responden por las pérdidas del club así que, o endureces las condiciones de acceso o te conviertes en Sociedad Anónima.

                La realidad paralela nos contaba, día tras día, con tenacidad machacona, que el vestuario madridista tenía un ambiente guerracivilista que se cortaba con un cuchillo. Salvo para el presidente, que jamás vio un motín o conato de rebelión a bordo ¿Entonces? Pues lo normal en estos casos: un desgaste en la convivencia, intentos de motivar al mejor portero del mundo, un entrenador muy profesional o exigente… Escuchado así, parece que estuviéramos ante la mejor temporada del Real Madrid de todos los tiempos y un paraíso en la tierra de la paz y de la armonía.

Tres años con Mourinho

                Tampoco cree Florentino Pérez que el Real Madrid se haya dejado parte de su histórica imagen en el camino de estos tres últimos años. Inventos de la prensa, que todo lo malinterpreta, por no hablar de los arribistas, que quieren hacerse famosos a costa del Madrid. La creciente hostilidad con la que el equipo es recibido en sus viajes, incluso en territorios históricamente amables con el madridismo, los conflictos con UEFA, árbitros, entrenadores rivales y medios de comunicación son, al parecer, distorsiones de la realidad que hace gente sin escrúpulos o simplemente interesada. Tendremos que repasar una vez más las ruedas de prensa de Mourinho para ver qué nos hemos perdido.

                En resumen, que la vida en el Real Madrid es tan plácida y el año ha sido tan sublime en resultados que se ha rescindido el contrato del mejor entrenador del mundo y se han convocado elecciones porque sí, para estar entretenidos y tener algo de lo que hablar durante unas semanas, que por aquí no pasa nada y, en caso de pasar, la culpa siempre es de Los Otros. Y puede que sea verdad y que los 8 entrenadores y más de 850 millones de euros  invertidos durante los mandatos de Florentino Pérez sean solo una pesadilla que nada tiene que ver con la realidad.

Escribe para 'El Chut': @lujimmix
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Balotelli, twitter y la pistola cargada

--> ¿Está usted aburrido? Pruebe suerte con Mario Balotelli. Busque su cuenta en twitter (@FinallyMario) y elija el momento adecuado. Procure que el bueno de Mario se haya acercado al portátil, que no esté entrenando, que se encuentre quizá frente al teléfono móvil, aburrido de jugar con su perra, o con su puerquito, o con su chica, o con sus videojuegos. Elija la pregunta que siempre quiso hacerle. Ejerza de periodista, pues esto del periodismo hoy día está abierto a todo el mundo. Y aguarde suerte, en la esperanza de que Mario Balotelli continúe respondiendo con sentido del humor a las tonterías que se le ocurren a individuos de todo el planeta. Porque las redes sociales son así, una pistola cargada en las manos de Supermario.

Un artículo de Diego García (@quincevidas).
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Cuenta oficial en twitter de Mario Balotelli.

     La tecnología avanza a pasos agigantados, y todos nos beneficiamos de ello. Unos, para buscar información para su trabajo; otros, para charlar con personas que viven lejos; y algunos, para mantener contacto con sus fans. Los futbolistas pertenecen a este último grupo. Twitter, Facebook… Los jugadores están a la orden del día en lo que a redes sociales se refiere.

Mario Balotelli Barwuah

     Balotelli, italiano de origen ghanés, es un futbolista de primer orden. Un jugador “top”, que diría el mismísimo Mou (que, dicho sea de paso, no fue capaz de domar a esta bestia insaciable). Excéntrico hasta decir basta, vive la vida al límite y suele pasar la raya que limita lo gracioso de lo grotesco numerosas veces.

Entre ellas:

-       

         - Tras recibir una tarjeta amarilla en un partido, un periodista le preguntó si entendía o no la cartulina, a lo que Mario respondió:

       "El árbitro vio mi cuerpo y sintió envidia. Por eso me amonestó".

       - El racismo es uno de sus resortes. No soporta que nadie lo discrimine por su raza, y jura venganza a todo aquel que lo haga:

"Si alguien me lanza un plátano en la calle o sobre un terreno de juego, iré a la cárcel. Porque lo mataré." 

-          También fue épico el día que se dedicó a lanzar dardos a los juveniles del City durante el entreno, o aquel otro en el que lo pararon con 25.000 libras en el coche, y respondió que él podía, porque era rico. Aunque quizás el punto álgido de sus excentricidades fue cuando incendió su casa mientras tiraba fuegos artificiales, o cuando en fin de año llamó a un pizzero, rondando la media noche, para cuando llegara su pizza recriminarle que llevaba un año esperando.

     Balotelli y twitter, twitter y Balotelli

           Vía Twitter también va soltando perlas. Hay que decir que lleva solo unas semanas, y que ya sobrepasa con creces el medio millón de seguidores. Por supuesto, a Balotelli le ha faltado tiempo para demostrar en la red determinadas facetas de su personalidad:

("No creáis nada de lo que leáis a no ser que venga de mí, chicos, ¿ok?")

("Una pregunta interesante… ¿La gente en Twitter pretende hacerse pasar por otro? Qué deshecho de gente en este planeta…")

     Y al ser cuestionado su nivel de inglés, objetó:

("Soy italiano, no inglés, así que si no te gusta mi gramática no leas mis mensajes")

Aquí Balotelli, ¿dígame?

     Balotelli comenzó con fuerza en la red de los mensajes cortos. Animó a los usuarios para que le formularan las preguntas más estrafalarias, y las empezó a contestar sin complejos. ¿Que le llaman feo? Mario responde. ¿Que le hacen una pregunta comprometida sobre futbolistas con los que no se lleva muy bien? Mario responde. Después borra mensajes por indicación de su club, y se queda tan ancho. Y se promete a sí mismo, probablemente, un comportamiento más recto. Pero al día siguiente vuelve a patear culos de buenos amigos, o de repente amenaza con matar (siempre en tono jocoso) a algún compañero. Y de vez en cuando aún responde a los improperios.

     Es cuestión de probar. Pruebe usted, amigo lector. Hágalo, eso sí, con buen gusto y sumo cuidado. No olvide que Balotelli dispone de un arma mortífera. En sus manos, twitter es una pistola con el cargador repleto.

Escribe para 'El Chut': Diego García (@quincevidas).
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Thiago Alcántara o el esperpento institucional

--> Es el mayor talento del fútbol europeo en la última década. Y el Barça lo deja escapar por una pésima gestión institucional. Culpable Sandro Rosell por encima de todos. Culpable Andoni Zubizarreta, presunto e inoperante enlace entre la directiva y el cuerpo técnico. Culpables también Tito Vilanova y Jordi Roura, encerrados en su burbuja del día a día, tomando decisiones atadas al presente y desconectadas de la filosofía que alimenta los éxitos del club, la que ellos mismos mamaron, la que les otorgaba en principio credibilidad para gestionar la mejor plantilla del mundo.

Un artículo de Sergio M. Gutiérrez.
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Thiago Alcántara. Foto: CastroQuini.

Thiago y su cláusula de rescisión

     Junio de 2011. El Barça consigue renovar a la joya de la corona. Thiago Alcántara cuenta apenas 20 años, pero lo quiere toda Europa. Y sabe que en el Barça habrá de tener paciencia, pues Xavi e Iniesta son intocables. Para colmo, el club está a punto de hacerse con los servicios de Cesc Fàbregas, el hijo pródigo marchado a Inglaterra. Inglaterra sería un buen destino para el fútbol de Thiago. Pero termina estampando su firma en el nuevo contrato que le ofrece Rosell. Su cláusula de rescisión asciende desde los 30 hasta los 90 millones de euros. Pep respira. Guardiola confía como nadie en el hijo mayor de Mazinho.

Pero la cláusula esconde condiciones. Facilita la fuga de Thiago si Thiago no juega tanto como espera. Los 90 millones se reducen a 18. El detalle no trasciende, sin embargo, hasta pasados dos años, cuando el futbolista se cansa de comprobar que las jerarquías impuestas por Tito Vilanova son inamovibles.

Una ganga de 18 millones

     Thiago Alcántara es el deseado, el centrocampista que todos los entrenadores de Europa querrían ver salir de su cantera. Gracias al empeño de Guardiola, Thiago incorporó conceptos defensivos y un portentoso despliegue físico a sus dotes innatas de genio de la pelota. Realizó con Pep un esfuerzo sobresaliente de sacrificio por el equipo. Asimiló las nuevas virtudes y creció como profesional. Y se convirtió en potencia (y casi en realidad) en el medio más completo del mundo, capaz de inventar maravillas al borde del área rival (como solía cuando contaba 17 añitos), capaz ahora también de sostener al equipo como pivote único al estilo Busquets. ¿Que pierde balones? Por supuesto, porque los arriesga. ¿Que no es Xavi? Nunca lo fue. De dónde habrá salido el bulo de que Thiago es el sustituto de Xavi. Thiago es Thiago Alcántara, un crack muy diferente.

--> El esperpento: Rosell jamás debió firmar una reducción de cláusula tan drástica. A sus 22 años recién cumplidos, Thiago es 12 millones de euros más barato que cuando tenía 20. Y muchísimo mejor futbolista. Una vez esa cláusula absurda está firmada, ¿cómo es posible que nadie se la comunique a los técnicos? ¿Cómo puede ser que éstos adopten decisiones contrarias a la estrategia del club? ¿Cómo se permiten frenar la proyección de uno de los mayores activos de la institución? ¿A qué se debe tan grave descoordinación institucional? ¿Cómo puede afirmar un entrenador del Barça que sus alineaciones dependen sólo del fútbol y del momento presente, que ni sabe ni quiere saber nada de los contratos que tienen firmados sus jugadores?

¿Acaso desconocen Tito y Roura que su trabajo también consiste en cuidar a los chicos de la cantera, en completar la última etapa de formación de Bartra, de Montoya, del mismo Thiago, de Tello, de Sergi Roberto, de Gerard Deulofeu? ¿Qué pueden esperar a partir de ahora todos esos futbolistas, si la filosofía de los técnicos es sólo el aquí y el ahora, si vale más el récord de los dichosos 100 puntos que los minutos que puedan sumar los jóvenes de la plantilla?

     Si Pep Guardiola hubiera pensado sólo en el presente, Busquets y Pedro jamás habrían existido. Sin Rijkaard, Messi no sería divino. Si Antic no hubiera declarado explícitamente en 2003 que ponía a Valdés por el futuro del club (no porque ya fuera el mejor portero de la plantilla, no; lo ponía por el futuro del F.C. Barcelona), quizá el Barça no habría ganado sus tres últimas Copas de Europa. Sin una apuesta decidida por el futuro, siempre por el futuro, el Barça se volverá una institución mediocre; se traicionará a sí mismo.

     Llámenme exagerado, pero la confesión de Jordi Roura en rueda de prensa ("hacemos el equipo sin mirar los contratos") me parece, decididamente, un motivo objetivo de despido. Un motivo más que suficiente.

Escribe para 'El Chut': @sergiomguti
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Mourinho, virtudes privadas y vicios públicos

--> Acabo de ver un interesante reportaje sobre José Mourinho. Un reportaje ‘amable’. Quiero decir, para que me comprendan, un reportaje en el que no se dice ni una mala palabra del entrenador portugués. Lo que viene a ser un lavado de cara. Con un entrevistador amigo (portugués para más señas), unos jugadores amigos (sus incondicionales Materazzi y Lampard), unos aficionados amigos (los miles de fieles que dejó en Chelsea, Inter de Milan y bastantes del Real Madrid)… Pero, pese a la ausencia de crítica alguna ni la presencia de una pregunta incómoda, la emergencia del dominio mediático del propio Mourinho (lo que Guardiola denominó como “el puto amo en la sala de Prensa”) te deja algún momento reseñable.

Un artículo de Jorge Segura (@jseguraclara).
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José Mourinho y Tito Vilanova, reproducidos con libertad creativa. Imagen: anpalacios.

La imagen negativa de Mou

     En un momento de la ‘amable’ conversación que mantiene con el improvisado ‘periodista’, Mou reconoce que “odia su vida pública”. El autonombrado ‘especial’ y rebautizado como ‘único’ confiesa que le encantaría tener “un interruptor con el que poder apagar” su imagen de hombre conocido.

     La reflexión, que interpreto como sincera por su parte, me catapulta a los comentarios que he recibido durante los últimos tres años por parte de muchos de sus defensores. Algunos de los más vehementes, también personajes de un perfil público notorio, han insistido en esbozarme un dibujo de un José Mourinho muy familiar, cariñoso, sensible… en la intimidad, que diría José María Aznar.

     A todos aquellos que han intentado ‘venderme’ ese otro Mourinho que nada tiene que ver con el “puto amo” de la sala de Prensa, el de comportamiento muchas veces histriónico, el de ego superlativo… a todos, siempre les contesté lo mismo: OS CREO.

     Sinceramente creo que pueda haber un José Mourinho tranquilo y cariñoso en la intimidad del hogar. Creo en un José Mourinho solidario que aquellos que más lo necesitan, normalmente niños. Creo en un José Mourinho que se preocupe por los problemas personales de sus jugadores. LO CREO.

     Pero a continuación, mi respuesta también fue siempre la misma: ¿Y QUÉ?

El Mourinho personaje público

     Que Mourinho sea un tipo afable en la intimidad no justifica sus actitudes públicas. Es más, si realmente su personalidad es tan elogiable en lo privado, su cara exterior supone aún más una preocupación… una vergüenza. De ser así, Mourinho habría sido capaz de dar la vuelta como a un calcetín al dicho “virtudes públicas, vicios privados” de Mandeville.

     Mejor o peor, llevo casi 20 años trabajando en el mundo periodístico. En el ambito futbolístico desde Tercera hasta un Mundial. Soy de los que ha visto casi de todo en ese entorno. De los que en un terreno de juego ha vivido peleas entre jugadores, agresiones de aficionados a árbitros… Pero jamás vi nada tan vergonzoso como el ataque de Mourinho a Tito Vilanova. Aquel dedo en el ojo, cobarde, traicionero, rastrero y su posterior continuación en sala de Prensa llamándole “Pito” fue el momento que define a un personaje. El que lo estampa públicamente, el que, efectivamente, le convierte en ‘the special one’ y luego en ‘the only one’.

     Tanto es así, que algunos pobres carentes de personalidad y raciocinio (acertadamente mi amigo Edu García les llama “cerebros rapados”) lo vieron como una señal y adaptaron el momento a “Tu dedo nos señala el camino”. Increíble. ¿El camino a dónde? ¿A la agresividad? ¿A la violencia? Porque a los títulos ya ha quedado evidenciado que no señalaba.

     Por cierto, que en el reportaje que me ha llevado a esta reflexión, el improvisado ‘periodista’ le pregunta “¿a qué jugador de su plantilla no escogería nunca como niñero de su hijo?”… Yo nunca le dejaría el mío a Mourinho…. Por cierto que él contestó que nuca se lo “dejaría a Adán”.   

Escribe para 'El Chut': Jorge Segura (@jseguraclara)
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